Relajación total

Entre por la puerta y solté una exclamación.
-Por dios que sitio tan...blanco.-le dije con cara rara, para los demonios ese sitio era lo opuesta nuestro mundo.

Vi como se callo y al no levantarse me acerque a el apresurada.
-¿Kevin?.-le dije moviendole ligeramente el cuerpo para que reaccionase.-Joder Kevin despiertate.

Respire aliviada.
-¿Estas bien?.-le dije preocupada.

-Desde que estabas colgando del techo.-le dije aun preocupada.-¿Estas bien?.-

Le cogí del brazo para que pudiese levantarse mejor.
-Lo siento, no sabia que ibas a marearte.-le dije mirandandole.-

-Soy un demonio Kevin, suelo mentir en casi todo lo que digo.-le digo, pero aun asi me separado de el unos metros.

-¿Que?, no estoy jugando contigo.-le dije algo molesta.-he venido aquí para decirte que no quería que te hubiese ido de mi habitación, solo lo hacia para..bueno no se para que en realidad.-

Me quede mirándole y una lagrima cruzo mis mejilla perdiéndose en el suelo.

-¿Piensas que lloro a propósito?.-le dije con la voz cargada.-te equivocas si lo piensas.-

Me acerque a el, le cogí por el brazo y me eche en sus brazos, hundiendo mi rostro mojado por las lagrimas en su cuello.

Me aferre mas a el, siento su cuerpo y cerré los ojos disfrutando de esa sensación. Como no me había dado cuenta.

Le miro algo rara y después asiento.